El Albergue O Xistral en Abadín (Lugo) es el primer albergue del Camiño do Norte, el Camiño de Santiago que entra en Galicia por Ribadeo, abierto en una vivienda rural de 1850 totalmente rehabilitada.
Las premisas eran claras, una rehabilitación limpia que permitiese incluir todas las mejoras necesarias en cuanto a habitabilidad, sostenibilidad, accesibilidad y comodidad de los peregrinos; pero a la vez que conservase la integración en el entorno de la finca y el resto de las viviendas del núcleo de As Paredes.
No hubo problema con los permisos de la Xunta y del Concello y terminó resultando un lugar que merece la pena visitar. Tampoco los hubo con la integración del resto de los volúmenes que conforman el conjunto construido o con los sistemas de ahorro energético que proveen a la casa de agua caliente y un ambiente térmico fabuloso de manera “desconectada” durante la mayor parte del año.
Pero esa imposición hizo que le diésemos la vuelta al proceso y el resultado de la imagen salió de la propia casa, que lo dice todo. Es un ambiente más que un logotipo, lo que hemos intentado plasmar. Cobran protagonismo la paleta de colores y el perfil del entorno de la montaña de Lugo que hemos intentado trasladar a la elección de la tipografía empleada.
Por otro lado, todo el mobiliario fue fabricado o rehabilitado de manera artesanal, así que pudimos contar con las formas y los colores de los objetos expuestos en el Albergue, fabricados y trabajados como hace mucho tiempo que no se hacía.
Una vez logrado el efecto desde el punto de vista arquitectónico: integrar toda la normativa existente en un edificio rehabilitado, tomamos datos y tramas del lugar para realizar la imagen corporativa que se implanta en la publicidad impresa, el sello que sirve para validar las estancias de los peregrinos y la página de la web.
Ahora han incluido también una piscina en el maravilloso jardín que, no sin esfuerzo, se ha mantenido lo más posible durante toda la obra de rehabilitación.
Nos encanta que los comentarios positivos hacia el albergue se centren también en el resultado de la rehabilitación. Ojalá les vaya todo lo bien que deseábamos cuando compartíamos con Jaime y Paula largas tardes de cafés y chimenea en busca de las soluciones más apropiadas.
Hemos intentado no estropear nada y creemos que lo hemos conseguido.
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